El encuentro del sábado entre el No. 1 Auburn y el No. 6 Tennessee fue una batalla física de principio a fin con los Tigres prevaleciendo, 53-51.
Tennessee tenía el balón con la posibilidad de ganar o forzar la prórroga cuando el base Zakai Zeigler falló este triple de esquina. Ambos equipos lucharon por el balón suelto antes de que Auburn driblara el resto del tiempo para sellar la victoria entre los 10 primeros en casa.
Ambos equipos lucharon por lanzar el balón durante toda la noche, como indicaría el marcador final. Los equipos sólo hicieron siete triples combinados.
No es de extrañar que el máximo anotador de la temporada de Auburn, Johni Broome, liderara al equipo con 16 puntos y 13 rebotes, aunque saliendo del banquillo. Broome se había perdido los últimos dos partidos de Auburn luego de sufrir una lesión en el tobillo izquierdo contra Carolina del Sur el 11 de enero.
Zeigler lideró a los Voluntarios con 14 puntos (4 de 15 tiros de campo). Antes del sábado, Tennessee (17-3, 4-3 SEC) había pasado por períodos en los que la ofensiva no funcionaba, incluida la derrota por 73-43 ante el entonces No. 8 Florida el 7 de enero. Encontrar algo más de consistencia en la ofensiva será crucial con el No. 9 Kentucky el próximo martes.
Auburn (18-1, 6-0 SEC) se mantiene perfecto en el juego de conferencia y extiende su racha ganadora a 11 juegos antes de un viaje a LSU el miércoles. La victoria fue descuidada, pero demostró que Auburn puede ganar cuando los tiros no caen.